El Real Zaragoza afrontaba un arranque de Fiestas del Pilar con un calendario muy exigente, en el que se tenía que enfrentar en apenas siete días a Numancia en La Romareda, Lorca en el Francisco Artés Carrasco y, de nuevo en casa, a Osasuna.
Después de dos empates consecutivos ante el Nástic y el Oviedo, el objetivo era claro: convertir el buen juego que había demostrado el conjunto zaragocista en resultados, para empezar a sumar posiciones en la tabla clasificatoria.
Y la semana no pudo comenzar de mejor manera para la formación blanquilla, con triunfo ante el Numancia, entonces líder de Segunda División, por un contundente tres a cero, gracias a los tantos de Borja Iglesias y, por partida doble, de Toquero. Tres puntos que supusieron la primera victoria del Real Zaragoza en el estadio de La Romareda en competición liguera.
Con la moral alta y el objetivo de continuar con esta dinámica, el conjunto blanquillo viajó a Lorca para enfrentarse a un equipo que no conocía la derrota en su estadio. Sin embargo, el esfuerzo y sacrificio del Real Zaragoza en el Francisco Artés Carrasco tuvo recompensa; los aragoneses vencieron por cero goles a dos, gracias a los tantos en la segunda parte de Javi Ros y Papunashvili, y de esta forma, cosechaban su segunda victoria consecutiva en Liga.
Con seis puntos de seis posibles, y con el equipo aupado a la décima posición, el conjunto de Natxo González afrontaba la última cita de esta semana ante el líder de la Segunda División: Osasuna. Un enfrentamiento muy atractivo para despedir las fiestas que atrajo a casi 23.000 aficionados a La Romareda. El Real Zaragoza se adelantó en el marcador gracias a un tanto de Borja Iglesias desde el punto de penalti. Un tanto de Oier en la segunda parte selló las tablas en un intenso y apasionante duelo.
Pese al empate, el Real Zaragoza ha dado un gran salto en la tabla clasificatoria esta semana al obtener siete puntos de nueve posibles. Unos números de los que, según Natxo González, técnico del Real Zaragoza, debemos sentirnos muy “orgullosos”. Además, el conjunto aragonés acumula seis partidos sin conocer la derrota, tras los previos empates ante Nástic y Oviedo respectivamente, y la victoria en Copa del Rey ante el Lugo.
