"La Romareda tiene que ser el jugador número 12, que el rival lo sienta de verdad, que esté incómodo; que noventa minutos aquí son larguísimos, tener esa paciencia, ese poso...". La ilusión de volver a casa envuelve al entrenador del Real Zaragoza, Juan Ignacio Martínez, en la antesala del encuentro que el sábado (18.15) enfrenta al cuadro zaragocista y a la Real Sociedad B. Porque el entrenador blanquillo está convencido de que "a lo largo de la temporada, La Romareda va a sumar muchos puntos, que es lo que todos deseamos". Por eso, además, transmite un deseo: "Ojalá este sábado, que La Romareda va a estar muy a tope, pueda llegar la primera victoria en casa".
Juan Ignacio Martínez transmite optimismo: "Soy de reforzar mucho. Veo la botella medio llena totalmente. El equipo está generando lo más difícil en el fútbol que son las ocasiones. Lo más importante es hacer ejercicios de asimilación para que el jugador coja confianza". Es su forma de ser, la convicción de que las cosas se están haciendo bien y que se ha sembrado de forma adecuada para recoger la cosecha del triunfo.
¿Qué se va a encontrar el Real Zaragoza? La Real Sociedad B "es un equipo que presiona alto, que tiene muy buen trato de balón; que si no lo neutralizamos bien, no podremos sacar nada positivo. Son chavales que llevan ya un tiempo con el míster, que tienen automatismos y que las incorporaciones les han dado un plus".
Uno de los retos esenciales que también plantea el entrenador es garantizar la solidez defensiva: "El objetivo es mantener la portería a cero. Los equipos que acaban en la parte alta son equipos que encajan pocos goles". Y lo redondea de forma específica: "Tenemos que tener una atención muy grande en las acciones a balón parado porque nos han costado puntos".
Para ello, resulta también fundamental el equilibrio en el equipo y una claridad en las ideas: "Tenemos el ADN del Real Zaragoza desde la pretemporada: presión alta, presión tras pérdida. Y en el aspecto ofensivo somos muy verticales".
Acaba Juan Ignacio Martínez reforzando el mensaje de la importancia del apoyo del público en un estadio que ha de convertirse en semillero fundamental de puntos: "Hemos estado un tiempo sin público, la afición sin poder disfrutar de su Real Zaragoza y todavía no les hemos dado esa felicidad de victoria. Yo creo que la temporada es larguísima pero hay que sumar muchos puntos en casa para conseguir lo que todos deseamos".
