La Romareda volvió a ser vanguardia del fútbol español con una nueva muestra del amor incondicional hacia los colores del Real Zaragoza. El partido contra el Extremadura lució una espectacular asistencia de 23.349 espectadores, una cifra espléndida, solo apta para pocos equipos del panorama nacional.
La afición arropó al equipo en todo momento; tanto en el inicio como cuando el marcador era adverso. Esa fuerza desde la grada se cohesionó con el espíritu batallador de un equipo que persiguió en todo momento la victoria.
Este triunfo fortaleció el vínculo que existe entre la plantilla zaragocista y los seguidores blanquillos, una unión que, sin duda, brindará muchos más éxitos al Real Zaragoza.